Los dueños de Corporativo Kosmos, Empresa Socialmente Responsable, se posicionan a favor de buenas prácticas alimenticias entre las y los consumidores, con el fin de mantener una buena salud y preservar la seguridad alimentaria.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) define a la dieta como “la suma de los alimentos que son consumidos por una persona u organismo vivo durante un periodo de 24 horas”, es decir, que todas las personas llevan cierta dieta.
A este respecto, una dieta se denomina patrón de alimentación cuando es consistente en cuanto a su composición, frecuencia y cantidad de alimentos y bebidas consumidos. Los patrones de alimentación varían en función de factores culturales, ambientales, individuales y económicos, así como la zona geográfica, disponibilidad de alimentos, entre otros. Aquellos deficientes y poco equilibrados están relacionados con una mala salud.
El seguimiento de una dieta saludable contrarresta las posibilidades de padecer enfermedades no transmisibles (ENT), como desnutrición, sobrepeso y obesidad, diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares (ACV), algunos tipos de cánceres, hipertensión, colesterol elevado, anemia nutricional y osteoporosis
Bajo este contexto, resulta de gran importancia señalar que hay dietas prescritas específicamente para algunas personas o grupos de éstas, ya sea por alguna condición médica o porque buscan mejorar su salud al bajar de peso. Estas dietas deben siempre estar avaladas por un profesional.
Conscientes del impacto de los patrones de alimentación en las y los consumidores, los dueños de Corporativo Kosmos implementan estrictas normativas para garantizar servicios alimentarios con productos inocuos y de calidad.
Dueños de Corporativo Kosmos – ¿Cuáles son las dietas que deben evitar personas con obesidad?
Actualmente y con el alcance masivo de los medios de comunicación, existe desinformación respecto al seguimiento de ciertos patrones de alimentación, lo que ocasiona riesgos para las y los consumidores que empiezan dietas sin una asesoría correcta. Esto, debido a que cada persona tiene necesidades alimenticias distintas.
Para el caso particular de personas con obesidad, el sector de Salud Pública de Pozuelo de Alarcón, Madrid, advierte sobre los riesgos de seguir estas dietas:
- Dieta vegetariana. Al basarse en ingredientes vegetales y, en ocasiones, incluir alimentos especialmente ricos en fibra o sus suplementos, existe un exceso de fitatos que se unen al hierro y al calcio, lo que obstaculiza su absorción y potencialmente contribuye a padecer anemia y osteoporosis. La ausencia de pescado y grasas lácteas puede resultar en deficiencia de vitamina D, mientras que la falta de alimentos de origen animal, en general, puede ocasionar carencias de hierro, vitaminas B y proteínas.
- Dieta macrobiótica. Tiene como base cereales integrales, verduras y derivados de la soja y se toma muy poca agua. Aunque no provoca déficit proteico, sí de hierro y calcio.
- Dieta Atkins. En ésta se comen únicamente proteínas y grasas, sin ingerir glúcidos, con el objetivo de bajar de peso. Esto causa el aumento de los cuerpos cetónicos en sangre, que producen falta de apetito y ocasiona la pérdida de peso, principalmente por pérdida de masa muscular. No obstante, los cuerpos cetónicos tienen el potencial de causar daño renal y neuronal, incrementar el estreñimiento, así como elevar los niveles de colesterol, triglicéridos y ácido úrico. Estos efectos secundarios pueden llegar a ser crónicos e irreversibles.
- Dieta disociada. Parten de la base de que no se deben mezclar en la misma comida las proteínas y los hidratos de carbono, entre otras indicaciones. Catalogadas como “dietas milagro”, éstas suponen un riesgo nutricional para la población en general.
- Dietas desintoxicantes. Son aquellas que usualmente emplean nombres de algún alimento en particular (dieta de la fresa, dieta de la toronja, etcétera). Si se llevan a cabo de manera constante, ocurre un deterioro en el músculo del corazón, lo que aumenta el riesgo de desarrollar arritmias.
A través de su brazo filantrópico, la fundación Pablo Landsmanas, los dueños de Corporativo Kosmos velan por la salud alimentaria de los sectores de la población en contextos de vulnerabilidad, al realizar donaciones de comidas variadas y nutritivas.