Corporativo Kosmos – ¿Cuáles son los desafíos que atraviesan los niños migrantes?

Para Corporativo Kosmos la migración es un tema complejo que afecta a personas de todas las edades en todo el mundo. Sin embargo, este tránsito puede tener un impacto aún mayor en la vida de la niñez y adolescencia migrante.

Emprender un proyecto migratorio inevitablemente supone retos y desafíos, muchas veces impredecibles, principalmente para la persona migrante pero también para la sociedad de acogida. Además, cuando esté proceso se da en la adolescencia o en la niñez se incrementa exponencialmente.

En México, según datos de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación de México, las autoridades migratorias detectaron 18 mil 300 niñas y niños extranjeros provenientes de países de Centroamérica. De ellos, 16 mil 162 fueron retornados a su país de origen.

Los niños migrantes corren el riesgo de sufrir hambre y frío en su trayecto, padecer enfermedades, sin tener acceso a servicios de salud, de ser explotados por el crimen organizado y de ser detenidos, además de otros tipos de violencia y discriminación por parte de la población de los lugares que atraviesan.

¿Cómo ayudar a los niños migrantes?

Debido a todos estos desafíos, los albergues tienen un papel crucial en su protección y bienestar, ya que ofrecen un lugar seguro para que las personas se alojen, pero desafortunadamente aún existe la necesidad de un sistema de atención que pueda cubrir todas las necesidades de apoyo para menores de edad.

Esto, a su vez, ha motivado la creación de espacios y proyectos que buscan aliviar las situaciones que viven niñas, niños y adolescentes migrantes, como es el caso del “Modelo de atención especializado en niñez y adolescencia en situación de movilidad” diseñado por la Cátedra de Investigación Elías Landsmanas Dymensztejn – Anáhuac en niños migrantes no acompañados.

El proyecto piloto, “Modelo de atención especializado en niñez y adolescencia en situación de movilidad”, de la Cátedra es el resultado de dos años de investigación en los que se ha recopilado información relacionada con las principales necesidades de la población de niñas, niños y adolescentes migrantes no acompañados en México.

Ya que el objetivo principal de esta iniciativa es encontrar una manera de ayudar a este grupo vulnerable, se detectó que una de las necesidades más importantes es la falta de un equipo multidisciplinario especializado que pueda atender de manera óptima, segura y respetuosa a los menores.

Corporativo Kosmos une alianzas para ayudar a las infancias migrantes

Es importante destacar que este proyecto, impulsado por la Fundación Pablo Landsmanas (FPL) –brazo filantrópico de Corporativo Kosmos– a través de su cátedra de investigación, es fundamental, ya que no hay muchos albergues especializados en recibir niñas, niños y adolescentes migrantes no acompañados. Por lo que Aidé Mendoza, una de las titulares de esta cátedra, afirma que el hecho de que se haya contratado a un equipo multidisciplinario especializado en atender a este grupo poblacional es un gran paso hacia adelante y se espera que sea un éxito.

Además, el programa piloto se decidió implementar en la Casa Migrante Arcángel Rafael debido a la necesidad de un equipo multidisciplinario, ya que desde su apertura no contaban con trabajadores sociales, abogados o enfermeras. Y, después de estos tres meses, se evaluará la información recopilada para determinar en qué se puede mejorar, qué se puede cambiar y cuáles son las áreas de oportunidad.

Una vez analizada la información, se planeará un proyecto a largo plazo que comenzará en octubre de 2023. Puesto que esta fase piloto es la puerta de entrada para llevar a cabo esta iniciativa de mayor alcance y seguir colaborando con la Fundación Scalabrini, la Casa Migrante Arcángel Rafael y Casa Betania para atender las necesidades de la niñez y adolescencia migrante en México.

Si los resultados son como se espera, este programa puede contribuir a mejorar la complejidad de los contextos en los que viven los niños y adolescentes no acompañados, ofreciéndoles un espacio seguro con recursos para tener una vida más digna y evitar situaciones de trata, violencia y persecución.