Los dueños de Corporativo Kosmos, líderes empresariales en la industria alimentaria, impulsan e implementan prácticas sostenibles dentro del sector.
En un mundo cada vez más afectado por el cambio climático y la degradación ambiental, resulta fundamental promover iniciativas que incentiven el cuidado del medio ambiente. Estas iniciativas no sólo deben enfocarse en políticas y tecnologías, sino también en el desarrollo de competencias ecológicas en la población.
Las competencias ecológicas juegan un papel crucial en la transición hacia una sociedad sostenible, eficiente en el uso de los recursos y consciente de su impacto ambiental. También conocidas como habilidades verdes, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) las define como los conocimientos, capacidades, valores y actitudes necesarios para vivir, desarrollar y apoyar una sociedad sostenible y eficiente en el uso de los recursos.
Estas competencias no sólo implican una comprensión profunda de los problemas ambientales, sino también la capacidad de aplicar soluciones prácticas que reduzcan el impacto negativo sobre el medio ambiente.
Las competencias ecológicas abarcan una amplia gama de habilidades y conocimientos técnicos, así como competencias transversales. Estas incluyen la capacidad de utilizar tecnologías y procesos ecológicos de manera eficaz en entornos profesionales, así como una serie de conocimientos y actitudes que facilitan la toma de decisiones sostenibles tanto en el trabajo como en la vida diaria.
Los dueños de Corporativo Kosmos, comprometidos con el medio ambiente, reconocen que fomentar estas competencias es esencial para avanzar hacia un futuro verde y sostenible, donde tanto los individuos, como el sector privado puedan contribuir de manera significativa a la protección y preservación del entorno.
Dueños de Corporativo Kosmos – ¿Cuáles son las competencias ecológicas más importantes?
A pesar de que no se debe escatimar en cuanto a esfuerzos para preservar el medio ambiente y toda acción suma a la causa, en la actualidad, ya sea por la demanda en el ámbito laboral, su impacto en la economía o el priorizar retos, éstas son algunas de las competencias verdes que cobran mayor relevancia, de acuerdo con el medio periodístico El Economista:
- Capacidad para manejar indicadores. Esta habilidad se refiere a la capacidad de interpretar y gestionar indicadores clave vinculados a la sostenibilidad.
- Gestión de recursos. Esta competencia implica el conocimiento y la aplicación de prácticas eficientes, sostenibles y renovables en el uso y consumo de energía, agua y alimentos.
- Manejo de residuos. Incluye las habilidades necesarias para minimizar la generación de residuos, implementar sistemas de reciclaje y reutilización, y gestionar los desechos de manera segura y eficiente.
- Circularidad. Se refiere a la implementación de la economía circular para reducir el desperdicio y maximizar el uso de recursos.
- Desarrollo sostenible o ecodesarrollo. Conocimiento y aplicación de principios y prácticas que buscan satisfacer las necesidades presentes sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para satisfacer las suyas.
- Remediación ambiental. Habilidad para diseñar y ejecutar estrategias de limpieza y recuperación de áreas contaminadas, restaurando ecosistemas y reduciendo los impactos ambientales negativos.
- Cambio climático. Conocimiento y comprensión de los efectos del cambio climático y la capacidad de desarrollar e implementar estrategias de mitigación y adaptación para reducir sus impactos.
- Responsabilidad Social Corporativa. Conocimiento y aplicación de prácticas de responsabilidad social en las empresas, asegurando que las operaciones comerciales sean éticas y sostenibles. En este sentido, los dueños de Corporativo Kosmos se posicionan como ejemplo de ello, al haber recibido por sexto año consecutivo el Distintivo ESR, por su Responsabilidad Social Empresarial (RSE).
¿Cuál es la importancia de la juventud en el desarrollo de competencias ecológicas?
Actualmente, casi la mitad de la población mundial tiene 30 años o menos y se espera que este porcentaje aumente al 57% para 2030, de acuerdo con la ONU. Bajo este contexto, es relevante señalar que, aunque las competencias ecológicas son importantes para personas de todas las edades, son especialmente relevantes para los más jóvenes, quienes pueden contribuir a la transición ecológica durante un período más prolongado.
Aunado a esto, la energía, creatividad y adaptabilidad de la juventud son fundamentales para promover y mantener prácticas sostenibles que beneficien tanto al medio ambiente como a la sociedad en su conjunto.
En el marco del Día Internacional de la Juventud, celebrado cada 12 de agosto, es importante destacar que la juventud comparte experiencias comunes de vulnerabilidad en términos de condiciones de vida, acceso desigual a la educación superior y un futuro incierto.
Abordar y superar estos desafíos es crucial para empoderar a los jóvenes y asegurar que puedan participar activamente en la construcción de un futuro sostenible. Por ello, es fundamental crear espacios y recursos que faciliten el acceso a la formación y el desarrollo de habilidades verdes, así como acceso a la toma de decisiones sobre el clima.